El 2 de agosto se conmemora el natalicio de Rómulo Gallegos, uno de los más grandes exponentes de la literatura venezolana y una figura fundamental en la cultura y la política del país. A través de sus novelas, como «Doña Bárbara», Gallegos no solo exploró la lucha entre la civilización y la barbarie, sino que también retrató con maestría los paisajes y la idiosincrasia de la sociedad venezolana. Su obra, cargada de un profundo realismo y compromiso social, sigue siendo un espejo de la identidad nacional, recordándonos la importancia de la educación y los valores democráticos que defendió como escritor y como presidente de Venezuela.

El 3 de agosto se celebra en Venezuela el Día de la Bandera Nacional, una fecha que evoca el invaluable legado del Generalísimo Francisco de Miranda. Fue en 1806 cuando Miranda izó por primera vez en La Vela de Coro, estado Falcón, el tricolor que hoy conocemos como símbolo de nuestra identidad y soberanía. Esta fecha no solo honra la valentía y visión de los precursores de la independencia, sino que también nos invita a reflexionar sobre el significado profundo de nuestros símbolos patrios, recordándonos el compromiso constante con la libertad, la justicia y la unidad de todos los venezolanos.

El 6 de agosto se celebra el natalicio de Andrés Eloy Blanco, uno de los poetas más queridos de Venezuela, cuya obra ha trascendido generaciones. Con un estilo que combinaba la sencillez popular y una profunda sensibilidad social, Blanco se convirtió en la voz del pueblo, plasmando en sus versos tanto el amor y la melancolía como la crítica social y política. Figuras como «El limonero del Señor» o sus poemas de la cárcel resuenan en la memoria colectiva, recordándonos su lucha incansable por la justicia y su inquebrantable fe en el poder transformador de la palabra. Su legado no es solo poético, sino también un símbolo de la resistencia pacífica y la defensa de los derechos humanos.